lunes, 22 de octubre de 2018

La compasión no es lástima

Éste último par de semanas, me ha tenido reflexionando sobre la compasión. Ojo: no hablo de la compasión que se origina por la lástima (que hay mucha), sino de la compasión que se deriva de la compresión de algo, de su entendimiento. El saber que hay que detenerse para reagruparse y darle sentido a lo que sucede. Reconocer que está bien sentirse patas arriba en un momento dado. Otra cosa: la compasión comienza con uno, antes de poder sentirla por los demás. Vuelvo y repito: compasión es comprensión, no lástima.