Semana de emociones

Creo que esta semana me caminé por casi todas las emociones conocidas: rabia, amor, cariño, frustración, culpa, impotencia, alegría, calidez, afecto, tristeza,  llanto, reconocer y aceptar  (no son emociones como tal, pero así las quiero manejar ) y cualquiera que se me pueda haber olvidado. En todos los casos es mi actitud hacia las situaciones, personales y externas, eso lo se...unas afectan más que otras...algunas me han hecho reconocer que por algo existen los límites, otras que el respeto y la prudencia son prioridad y otras, que es bueno darse permiso para sentirlas y TODAS me permiten preguntarme para que estoy experimentando esto...

...estoy muy lejos de tener todas las respuestas, pero aquellas que si han tenido respuesta, me permiten crecer, evolucionar, darme cuenta en donde tengo que hacer ajustes  (en mi), así eso implique algunas lágrimas, desaprender y reaprender y sentirme fuera de lugar conmigo misma...me parece increíble la gran cantidad de cosas que tenemos guardadas dentro de nosotros mismos con las cuales nos hacemos daño,  así la razón y la lógica indiquen lo contrario.

8 meses

Ya mañana son 8 meses que mi mami partió de este plano...un tiempo que parece que ha pasado rápido y en el cual cambié como ser humano, como hija, como hermana; he cambiado/crecido/evolucionado.

Hoy conversaba con alguien que conoció a mi mamá y recordaba momentos compartidos con ella; me reí muchísimo con los cuentos. Esa era mi mami: riendo en donde llegaba, dejando una huella hermosa en las almas que tocaba.

El amor trasciende; la amo al infinito y más allá y se que ella me ama. Bendición Má ♡

Hacer lo que nos gusta

Es realmente satisfactorio hacer lo que nos gusta. Ayer comencé un entrenamiento de algo que desde hace mucho tiempo quería hacer; me siento happy y se me alegra el alma. Es un camino de crecimiento y evolución. Simplemente feliz ♡

La culpa: un sentimiento que no agrega valor

Anoche tuve un sueño, medio sin coherencia, pero que me revolvió la sentimiento/emoción/reacción/actitud de culpa. Mientras más pienso en ella, más me convenzo que es una más de las muchas programaciones que la mayoría de los seres humanos cargamos dentro de nosotros y que viene de épocas lejanas como el asunto de la manzana de Adán y Eva (cero polémica con el génesis.)

He vivido situaciones en mi vida en las que me he preguntado si hubiera podido hacer más o si lo hubiera podido hacer diferente. Desde hace mucho tiempo (ni recuerdo cuando) he pensado que lo que sucede, sucede porque así debe pasar y, de poderlo modificar, se hubiera tenido la oportunidad para ello...es sólo que cuando la situación experimentada le mueve a uno los cimientos al punto de cambiarle la vida, el inconsciente comienza a sacudirle a uno las dudas, la inseguridad y empieza: "¿y si yo hubiera..?" Demás esta decir que los hubiera lo destruyen a uno.

Cuando entro en éstos momentos, porque ya son momentos, me detengo, me centro, me recuerdo que de haber podido ser diferente, seria y regreso al aquí y al ahora con unas cuantas lágrimas y sin hacerme daño.

Soy una cebollita

Los procesos de evolución, crecimiento  (o darse cuenta) son como una  cebolla: las capas van saliendo a medida que  uno va reconociendo y aceptando, hasta llegar a ese centro libre y puro de tanta cosa, y uno se siente pleno. Yo soy una cebollita. Estoy botando capas, reconociendo y aceptando situaciones, agregando valor a mi bienestar. Se siente super!

Reflexionandito...

Cuando me encuentro ante alguna situación me pregunto: ¿Qué tiene esta situación para enseñarme? Y ¿Para que me está sucediendo esto? Normalmente, no recibo la respuesta al momento, allí mismo, pero se me abre un abanico para hurgar dentro de mi y encontrar aquello que necesito mejorar en mi y de la cual la situación per se es un reflejo.

Mi externo país y personas amadas que me rodean viven convulsionados; todos los días es algo y nos afecta (me incluyo) en forma muy negativa. En ocasiones siento que el día se va en quejas, en afirmaciones y decretos en negativo...en creer que no se puede...anoche eso era lo que sentía...y me agobiaron cualquier cantidad de emociones negativas, que es lo menos que necesito o necesita cualquier ser humano para su salud. Mucho de lo que sucede en el externo está fuera de mi control y del control de muchos; habrá quienes digan que soy una tarada porque no me quejo de lo que sucede. Quejarse no resuelve y no agrega ningún valor...creo que habría que identificar que puede hacerse dentro de tanto caos para mantener las ganas de echar hacia adelante y mantenerse centrado y saludable.

¿Qué me digan comeflor? Eso me tiene sin cuidado. Creo que mucho de lo que estamos experimentando está enseñándonos a valorar y a apreciar todo aquello que considerábamos garantizado y seguro; claro, esto es sólo mi opinión. Soy de las personas que CREEN en el poder de la fe y de la oración, aunque muchos se ríen en mi cara cuando lo menciono y no me importa; no trato de convencer a nadie. Cada quien camina por la vida como cree que debe caminar. A todos nos están pasando tantas cosas...así como hay una situación país para todos, hay una situación personal para todos y cada quién las maneja lo mejor que puede y, ojo, no significa que esté mal como se manejen...cada quien utiliza las herramientas que tiene. Cuando me entran las angustias, me pregunto ¿hasta cuando?..y pienso: hasta que todos y cada uno comprendamos la enseñanza que la situación tiene para nosotros...bueno, mi creencia es que algo no se ha aprendido, porque si no ya estaríamos en camino de construcción.

La palabra tiene poder

Llegué a la conclusión de que no préstamos atención a lo que decimos, cuando todo lo que pensamos y lo que sale de nuestra boca es un decreto que se encontrará con nosotros más adelante. Las palabras TIENEN poder.

Ayer, en el trabajo, lo que escuché fue pura queja, de todo tipo. He aprendido que la queja no agrega valor, solo contribuye a que nos sintamos impotentes hacia lo que nos aqueja. Se que las situaciones pueden abrumarnos, sobre todo cuando están fuera de nuestro control, más pienso que hay que continuar hacia adelante y preguntarse: que puedo hacer para superarlo.

Creo que hay que aprender de lo que nos sucede. Que en ocasiones no es fácil,  lo se; que toma tiempo, también lo se...pero se intenta, con voluntad, comprendiéndose uno mismo. Pensando que se puede; viendo como puede funcionar para uno. Buscándole la parte buena. Soy y seré una eterna optimista. Puede que me caiga y me tome tiempo levantarme, pero lo hago. ¿Fácil?  No, pero se puede. Estoy segura que todos tenemos ejemplos de superación en nuestra vida.

A cuidar un poco lo que pensamos y decimos; intentemos ser más positivos todos los días.

Llenarse el alma

Cada vez me convenzo más que uno debe hacer lo que le llene el alma, lo que le de bienestar espiritual y físico, siempre y cuando no dañe a quién lo hace, ni dañe a terceros. Dejar de lado los tengo que, hay que y los debo.

Cuando algo me llena el alma...

Desde la semana pasada estoy tratando de expresar como me siento en relación a una cena en la que brindamos por  mi mami y por su vida. Me siento tan honrada y me emociono tanto cuando reconozco lo bien que eso me hizo sentir, que como que se me enreda la capacidad de expresarlo.  Así que gracias infinitas Maru y mami Mago. Las amo inmenso.