Hablar por hablar

Me molestan las suposiciones; me engrincha la gente que supone y, lo más triste es que de esos hay muchos. Una suposición no es real;  es una creación de quién la manifiesta. No se basa en un hecho sino en algo que alguien cree. Y muchos van por la vida esbozando suposiciones como si fueran hechos, generando ruido, confusión y malas interpretaciones a su paso.

Tenemos que ser más responsables; ya basta de hablar por hablar. Si no sabemos, preguntemos. Hablemos conociendo los hechos. Nada más triste que aquellos que hablan de lo que no saben y opinan de lo que no conocen.

El poder de la palabra

Creo firmemente en el poder que tiene la palabra desde que la pensamos, por eso no ceso de sorprenderme  de la cantidad de cosas que la gente dice y asevera, sin pensar, y después se preguntan por qué las cosas no mejoran. Un porcentaje altísimo de lo que se escucha es negativo; en algunos casos, parece una adicción a ver quien puede decir algo que le gane a lo dicho anteriormente. En éstas ocasiones, prefiero permanecer callada; si no puedo edificar, el silencio es el mejor aporte. Por eso aprecio tanto una buena conversa.

...de cabeza...

Siempre se que decir o de repente no se, pero siempre he encontrado palabras para dar aliento, ofrecer un apoyo...ahorita me encuentro sin saber que decir...la vida, a veces, se pone y nos pone de cabeza y,aunque uno no entienda, se sigue hacia adelante.

Amar, querer, no es lo mismo ni se escribe igual

Pensandito aquí: cada quien quiere o ama como aprendió a hacerlo...creo que no hay receta para querer/amar. Creo (para mi ES) es importante la reciprocidad en los afectos y la sinceridad de los mismos. Si no hay reciprocidad, allí no hay nada que buscar. No creo en esa lavativa de que querer/amar es para sufrir...ya no. Quienes se quieren/aman deben sentirse plenos en el sentimiento. Uso ambos términos como iguales porque me he dado cuenta que usamos más querer que amar...pareciera que amar es un sinónimo de responsabilidad y compromiso y como que asusta; la gran mayoría de las personas se incomodan cuando uno les dice que los ama. Ambos términos son muy diferentes, pero pocos los tratamos e interpretamos de esa forma.

Hay algo importante, o para mi lo es (cuesta aceptarlo por la gran cantidad de acondicionamientos que tenemos): que no nos quieran como nosotros queremos, no significa que no lo sientan. Creo que es uno quien debe identificar como se siente al respecto y si eso es lo que desea. Creo que he escuchado "es que estas en un nivel más alto" más de lo que quisiera. Y, ojo, no me siento ni me considero más que nadie. Ya hoy día pienso que si el otro piensa que no está a mi altura, es una situación que él debe resolver. Ya me dejé de tratar de convencer a nadie.

Sintonizarnos

A veces lo que necesitamos es sentir aquello que queremos, sintonizarnos con ese sentir y confiar en lo que sabemos: que viene a encontrarnos.